A través de fotografías, cerámicas y dibujos realizo distintas series donde exploro los límites de representación del retrato y el paisaje.

Las fuentes que utilizo para desarrollar mi trabajo provienen de la escritura de diarios personales e imágenes de la cultura popular, tanto del ámbito de lo privado como los álbumes de fotos de familia, o de lo público, como fotografías tomadas de internet o la prensa. En algunos trabajos utilizo también la cita a obras de artistas del pasado que tuvieron alguna vinculación con la región donde vivo.

Entre los recuerdos de mi historia familiar y la ciudad de San Miguel de Tucumán, capital de una provincia del Noroeste de Argentina, me interesa observar las imágenes que comparten las personas y aquello que da cuenta de una forma de ver el mundo. Los pequeños rituales de las familias, los objetos cotidianos que decoraban y aún se guardan en las casas, las esculturas de los parques que perviven como huellas de distintas épocas, la relación ambivalente con una naturaleza descripta desde hace siglos en términos de abundancia (El Jardín de la República), en medio de los fuertes contrastes que hoy atraviesan esta sociedad.

Mi aproximación a todas estas cuestiones es personal, desde la experiencia de la vida cotidiana, donde están presentes las relaciones de afecto y el registro de sensaciones. Así, mi forma de trabajo consiste en investigaciones no formales, búsquedas a tientas, recorridos por la ciudad o notas autobiográficas, escrituras y traducciones sobre ciertos temas.
En mis primeras obras realizaba maquetas a partir de fotografías de mi álbum familiar a las que luego fotografiaba. A partir de una extensa serie de piezas de este tipo, los personajes empezaron a “salir” del plano para transformarse en retratos construidos en cerámica. En mis últimos trabajos desarrollo además series de dibujos con grafito y carbonilla, donde aparecen paisajes, cuerpos o contextos donde incorporo elementos de la imaginación y trazos contrastantes.